miércoles, 25 de diciembre de 2024

INSATISFACCIÓN SEXUAL Y ESPÍRITU



Es posible que si yo hubiera podido alcanzar satisfacción sexual en mi juventud, hubiera podido vivir más sano psicológicamente y más productivo intelectualmente. Pero la insatisfacción sexual crea ESPÍRITU, aunque sólo sea por el combate entre sublimación y desublimación que en ella tiene lugar, y no considero baldía toda la calidez emocional superior que la insatisfacción sexual me produjo en mi juventud. El siempre psicológicamente sagaz Friedrich Nietzsche diría que esa calidez no era otra cosa que la lascivia que se apoderaba de mi conciencia y se manifestaba en sus niveles supuestamente más altos. ( “ Estos son sin duda continentes :más la perra sensualidad mira con envidia desde todo lo que hacen. ¡ Y con qué buenos modales sabe mendigar la perra sensualidad un pedazo de espíritu cuando se le niega un pedazo de carne!”) Pero yo, contra Nietzsche, digo que esa calidez emotiva, ese ESPÍRITU, me permitió, como tal, captar y apreciar valores estéticos, intelectuales y también religiosos mejor que otros, satisfechos sexualmente y convertidos por ello en mentes funcionantes con normalidad y adaptación pero sin ESPÍRITU.